Todos aquellos que en su vida han dedicado tiempo al arte de escribir (en serio) o se han visto obligados a escribir (en serio también, véase caso tesis de grado) saben, conocen y sienten la horrible y desesperante sensación de tener un torbellino de ideas ahogadas por esa página en blanco y esa línea vertical negra titilando, riéndose de ti o retándote a empezar de una vez por todas a explanar todo eso que quieres compartirle a quien pudiera interesar. En mi caso, fue un reto, y gracias al empujón de una buena amiga (thanks Sharo) y la terca insistencia del cursor es como doy inicio a este espacio de opinión, reflexión, sátira, a este humilde espacio, donde escribiré si mi amigo/enemigo el cursor titilante me lo permite, de todo aquello que me rodea, sin caer en lo efímero, más bien en lo profundo buscando generar en quienes me hagan el honor de leer, las ganas de PENSAR y ACCIONAR de generar ideas y propuestas que EN SERIO se puedan llevar por estas calles que tanto lo necesitan.
El Justo Medio de Aristóteles buscaba el equilibrio de los insanos extremos, en Venezuela y Latinoamérica, región de extremos, queremos mostrar que la virtud, ese querer y poder actuar bien y en pro de los menos beneficiados si es posible y es un camino necesario para la construcción un mundo mejor (valga el cliché), se dice rápido, pero intenta construir un mundo mejor sin que te aplasten. Si las cosas que dice Mafalda, Los Beatles y Les Luthiers te suenan, puede que este espacio sea de su agrado, si no, siempre es bueno leer, con el debido discernimiento.
